Con la pasta por delante - día 2: Martos
Después de Mengíbar vino Martos. En este caso se trataba del "Blooms Day", un sitio para el que "un pub irlandés" es una descripción aceptable. Llegamos primero Oscar y yo, en una de esas raras ocasiones en que llegamos antes de tiempo (no hay explicación, simplemente sucedió), así que tuvimos tiempo para montar, probar, sonorizar ... tranquilamente. Incluso tuve tiempo de comprar pilas para mis pedales (ha habido algún concierto en el que no haya tenido este problema?). Se acerca el momento de subir al escenario. Migue pide unas copas, volvemos a afinar los instrumentos, bebo un poco de mi copa, vuelvo a afinar mi guitarra y dejo la copa en el escenario. Luego Oscar se toca la barriga y dice "yo estoy malo!" , esa es la señal y subimos al escenario.
Finalmente el concierto estuvo bien, la acústica de la sala era buena y aunque las guitarras no habían sido microfoneadas yo me oía bastante bien y toqué a gusto. Por cierto, eso que tengo delante mío es un micrófono (siiiii, ya me dejan hacer coros!) Además, se pasaron un buen número de amigos, incluído Gollo, que hizo el viaje (en bus!) desde Granada (gracias !!).
Luego nos acostamos en un pisito de por ahí y constaté lo que ya me temía: Oscar ronca como un rinoceronte con paperas ...